Después de la valoración nutricional del paciente, llega el momento de empezar a calcular el plan dietético que debe seguir. Este plan debe apuntar a todas las necesidades, rutina, trabajo y disponibilidad del paciente, buscando siempre mejorar no solo su alimentación, sino también su bienestar.
Para ayudarlo en esta tarea, hemos separado algunos consejos sobre cómo configurar un plan de comidas y cómo optimizar su trabajo al realizar el cálculo ¡Sigue la lectura!
Evaluación nutricional
La evaluación nutricional es un paso fundamental que identifica a los pacientes en riesgo nutricional a través de la historia clínica, datos bioquímicos, antropometría y valoración clínica. Con esta investigación se podrá comprobar si existe relación entre alguna enfermedad y el estado nutricional del paciente.
Después de esta etapa, será posible establecer un plan de dieta adecuado a las necesidades del individuo. Otros puntos a analizar son:
- Historial dietético previo o posibles cambios realizados;
- Capacidad física para ingerir alimentos;
- Intolerancias alimentarias;
- Cambios de peso recientes;
- Presencia de trastornos alimentarios;
- Estreñimiento intestinal
El cálculo del plan de alimentación.
Tras analizar al paciente, llega el momento de calcular el plan de alimentación en base a la información obtenida sobre su salud, rutina, hábitos, etc. El propósito de este cálculo es producir un balance energético negativo que reduzca el peso.
Cuando el cálculo no se hace correctamente, o ni siquiera se hace, hay alimentaciones desequilibradas que no aportan resultados al paciente, ya que cada individuo tiene una necesidad diferente al otro.
Podemos citar como ejemplo de planes de alimentación que no tienen resultados comprobados el de bajas calorías, que presenta cambios muy marcados en el valor de los macronutrientes, que también pueden resultar en cambios en el estado de los micronutrientes.
El plan de bajas calorías enfatiza un grupo particular de algunos de los nutrientes (carbohidratos, proteínas y grasas) y excluye su ingesta. Aunque este tipo de dietas puedan ser seguidas fácilmente por las personas debido a la naturaleza del ser humano para enfocarse en algo, el tiempo que el individuo permanece curioso es limitado, y la desarmonía en hábitos y costumbres contribuye al abandono del plan, independientemente del resultado inicial.
Optimización del cálculo del plan de alimentación
Como hemos visto, para calcular el plan de alimentación de su paciente, se hace necesario tiempo y paciencia para hacer el trabajo correctamente. Sin embargo, teniendo en cuenta la gran cantidad de pacientes que atiende a diario un nutricionista, esta tarea puede volverse agotadora y llevar mucho más tiempo
Hoy en día, para ayudarte, existen software que optimizan este trabajo y calculan el plan de alimentación de forma eficaz. De esa manera, hay tiempo para pensar más en la estrategia del plan de alimentación individual y puede entregarlo mucho más rápido.
¿Viste lo fácil que es y por qué es importante calcular el plan de alimentación? Siguiendo nuestros consejos, verá grandes resultados y avances en la alimentación de sus pacientes.
Ahora que sabes cómo preparar una buena estrategia para armar un plan de alimentación eficiente, ¿qué piensas de optimizar tu trabajo con un software que pueda ayudarte en esta tarea? ¡Conoce el Dietbox y empieza ahora!